A principios de los pasados 80´s, Japón se puso a la vanguardia en el sector de los videojuegos, sobretodo después del gran vacío que dejó la famosa crisis de los videojuegos de 1983 en Estados Unidos. Un tiempo donde eclosionaron compañías como Sega, Nintendo, SNK, Capcom, Namco, etc. Todas ellas generaron (y algunas actualmente generan), una nueva forma de jugar a los videojuegos. Crearon personajes que actualmente reconocemos como iconos de la cultura pop, y rompiendo la frontera de los exclusivo japonés, para ser algo totalmente internacional.
Un hardware y un software que de una generación de consolas a otra, dejaba de ser tendencia, para quedar obsoleto y terminar el las populares tiendas de segunda mano niponas.